El Centro Escolar Católico “Inmaculada Concepción”, en el Puerto de La Libertad, implementa un proyecto educativo de “Flauta dulce y solfeo”, con estudiantes de primero y segundo ciclo, el objetivo es descubrir talentos musicales, desarrollar las habilidades y destrezas de los estudiantes.
El Ministerio de Educación (MINED) promueve estas actividades socioemocionales en el periodo especial de pandemia por el COVID-19. Por eso, es vital que las instituciones educativas sigan impulsando las actividades artísticas y culturales con los alumnos.
El profesor de música, Roy Ramos, estudió en el Centro Nacional de Arte donde encontró el gusto por la música. Tiene cuatro años de trabajar en la institución educativa y está cargo de la banda de paz, el coro y la orquesta; ahora, se agrega el grupo de alumnos de flauta dulce y solfeo.
«Este es un proyecto ambicioso, la ejecución de un instrumento básico como la flauta permite el desarrollo intelectual y artístico de los alumnos, desde primer grado hasta sexto grado (…) acá le damos teoría, lectura musical y le enseñamos a leer pentagramas y partituras», explicó el docente.
Este tipo de asignatura tiene la ventaja de ayudar al desarrollo socioemocional y artístico. Además, de mejorar la coordinación de los dedos y la vista, la capacidad de respiración, estimula la memoria, mejora el nivel cognitivo y disminuye los niveles de estrés de los estudiantes.
Irvin y Arven, son alumnos mellizos y viven en el Puerto La Libertad, ambos estudian 5º grado y están en el grupo de flauta dulce, pero destaca Irvin porque su aprendizaje pasó las fronteras de las aulas y él busca expresiones independientes, es decir aprendizajes propios de canciones que le gusta.
Irvin ve tutoriales y aprendió nuevas piezas musicales interpretadas en flauta. «En casa le dedico unas tres horas a tocar flauta viendo los tutoriales (…) interpreto: “Himno a la Alegría”; “Noche de paz”; “Peces en el río”; y otras como: “El chavo del 8” y “Titanic” y las piezas que nos enseña el profe Roy», dijo Irvin.
En el CECE “Inmaculada Concepción”, se desarrolla un aprendizaje integral, no solo es tocar flauta, también se agrega el solfeo, una técnica que enseña la entonación con la voz durante la lectura de la partitura, esto ayuda a determinar el tono de la nota que se requiere. «Estamos descubriendo nuevos talentos, porque queremos hacer un ensamble de instrumentos musicales y voces, con la orquesta y el coro de la institución», destacó Roy Ramos.
El propósito es estimular el cerebro y la coordinación de manos de los estudiantes, lo que permite obtener tonos articulados que son música para los oídos. Esta academia musical que se imparten en las instituciones educativas es parte del Plan de Continuidad Educativa que implementa el Ministerio de Educación con el fin de que los estudiantes ocupen su tiempo libre en actividades positivas, mientras siga el periodo de riesgo por la pandemia de COVID-19.