Jeimy G. es una estudiante de segundo año de bachillerato de la opción Técnico Administrativo Contable del Instituto Nacional San José Guayabal en Cuscatlán, a quien su limitación física en sus piernas y la pandemia, no han sido un obstáculo para desarrollar la continuidad educativa.
Ella comentó, que desde pequeña tuvo algunas dificultades para desplazarse en los centros educativos, pero también asegura que eso no ha sido un impedimento para su formación, «yo no hice parvularia, inicié en primer grado, pero se me hacía difícil porque no había rampas como aquí, algunos dejan de estudiar, pero en mi caso, lo bueno es que, toda mi vida he tenido compañeros y maestros que me han ayudado».
«Yo no veía a otros niños en silla de ruedas o con alguna otra discapacidad llegar a un grado tan alto, al menos en esta zona, pero yo busco formas, sé que puedo sola y que también hay veces que necesito ayuda, y en eso mis compañeros me han apoyado mucho al igual que mi familia. Yo nunca he sentido que me han tratado diferente, soy una compañera más, me ha costado un poco más y también a mis padres poder llegar hasta bachillerato», acotó Jeimy.
En cuanto a la pandemia la estudiante expresó que «al principio fue difícil ?continuar con su formación? porque no contaba con las herramientas necesarias y además con el encierro uno se abruma. Al inicio nos dieron las guías de trabajo, luego video llamadas en Meet, pero siempre es un poco difícil el aprendizaje, pero ahora la computadora vino a ser de gran ayuda para mí, porque no es lo mismo estar trabajando en un teléfono, que además daña más la vista, que estar trabajando en una computadora, es más amplia ?la imagen?, es mejor».
Además, la joven dijo que «tenía una computadora chiquita pero, como todas al cabo del tiempo dejo de funcionar e iba a pedir ayuda para que me donaran una, pero en eso vi que el gobierno iba a entregar computadoras. esta computadora ha sido de gran ayuda para mí, ya que ahora tengo mi propia área de estudio, tengo todo para elaborar mis tareas, buscar información y recibir clases, es un gran aporte para mí, porque antes no tenía esa facilidad».
«Al principio creí que solo nos la iban a dar y que al terminar el año la teníamos que regresar, pero cuando me dijeron, esa computadora va ser tuya cuando salgas del bachillerato, dije: ¡que bien!, esto me va ayudar bastante cuando estudie en la universidad o algún curso. Me alegra tener una herramienta que me va servir mucho, es una ayuda que nos han dado a cada uno de nosotros», agregó Jeimy con una gran sonrisa.
Desde niña, Jeimy ha tenido sueños y metas y uno de ellos es estudiar Licenciatura en Nutrición y Dietética, «.es una carrera que me llama la atención, porque es como ayudar en la calidad de vida de una persona mediante una nutrición sana; en mis planes está salir de bachiller, buscar alguna beca, porque no tengo los recursos necesarios para seguir con mis estudios».
Jeimy aprovechó la oportunidad para motivar a otros estudiantes, que como ella tienen alguna discapacidad, para que continúen con sus estudios: «Los invito a seguir superándose, a que no se detengan o se queden estancados, siempre hay alternativas para poder solucionar cada problema y siempre habrá personas que te quieren ayudar».
El Instituto Nacional San José Guayabal cuenta con una población de 355 estudiantes, distribuidos en 10 secciones, atiende el nivel de Bachillerato General y el Técnico Administrativo Contable, además, cuenta con una planta de 12 docentes.