Daniella Alexandra, alumna del Centro Escolar H. San German, en el departamento de Sonsonate, desde pequeña descubrió el amor por el arte, la cultura y la expresión. Su sueño de profesional es ser veterinaria y cuidar a los animales.
Ella es una estudiante muy entusiasta, nunca falta a sus clases, presenciales y, ahora, virtuales; siempre sobresale en las asignaturas de Lenguaje y Literatura; Ciencias Naturales y Matemática. Además, le gusta pintar paisajes naturales, escribir mensajes positivos, editar videos en su dispositivo electrónico y participar en actividades teatrales.
Daniella es un ejemplo de perseverancia. “Desde los cinco años me gusta participar en las actividades escolares (…) me gusta el teatro, hace poco presente la obra “El Pastorcito”, con apoyo de mis primos. Además, participamos en la expresión de arte musical sacando sonidos con las manos, con una cuchara, una cacerola o platos; también me gusta pintar cosas naturales: árboles, flores, el cielo o la luna “, dijo con entusiasmo.
Actualmente tiene 13 años y desde kínder estudia en la misma institución educativa. Su perseverancia y dedicación al estudio le permitieron pasar al séptimo grado con notas de 9 y 10.
“La discapacidad es la capacidad de ser extremadamente capaz”, así reza un rótulo ubicado en una de las aulas de la escuela, y la maestra Iris López de Salazar lo ve plasmado en Daniella Alexandra, quien destaca por su talento artístico. “Ella participó en las actividades virtuales con mucho entusiasmo, en diferentes muestras artísticas (…) expresión corporal y facial, en teatro de sombra con su familia o, inclusive, en las actividades físicas, a pesar de su limitación motora”, dijo la maestra.
La estudiante tiene el total apoyo de su familia y los docentes para realizar las tareas académicas. No hay barreras para ella, le gusta ver tutoriales sobre clases de piano, edición de videos, pintura u otra actividad artística.
La directora del centro escolar, Alba Siliezar de Chávez, manifestó tener una matrícula de 362 estudiantes y, con orgullo, dice “tener una escuela inclusiva”. Asimismo, agregó: “Tenemos cuatro alumnos identificados con discapacidad: dos alumnos con discapacidad motriz, una niña con discapacidad auditiva y otro con discapacidad visual”. Chávez añadió además que la institución se va adaptando a las necesidades del alumno, por ejemplo: construyendo rampas, moviendo la sección para facilitar el acceso u otras necesidades físicas.
Desde 2011, en el país entró en vigencia la Ley Especial de Inclusión de las Personas con Discapacidad, que tiene por objeto reconocer, proteger y garantizar el ejercicio y disfrute pleno de los derechos de las personas, para tratarlos con igualdad de condiciones.