Luego del anuncio de la suspensión de clases por 30 días, para estudiantes del sector público y privado de todo el país, ante la emergencia por la pandemia COVID-19, los docentes elaboraron guías o contenidos académicos para que los estudiantes desarrollen en sus casas, a fin de cumplir con lo requerido en el Plan de Continuidad Educativa.
Para que este proceso sea más fácil y amigable, entre padres y madres de familia y los estudiantes, el jefe de capacitación y psicólogo del Ministerio de Educación (MINED), Mario Alejandro González, brinda algunos consejos o recomendaciones que pueden ayudar a enfrentar esta situación, de una manera agradable, con cariño y paciencia, para que sea un proceso real de aprendizaje y no un dolor de cabeza.
«Por la situación de emergencia que tenemos, el recurso que tiene la escuela en este momento es enviar guías de trabajo para continuar el proceso educativo. En ese sentido, pareciera que hay personas que están agobiadas por este tema; realmente, agobiarse en este caso es perder la mitad de la batalla. Lo principal es conservar la calma y seguir estos consejos», expresó González.
En primer lugar, el psicólogo plantea que «debemos resolver los problemas de organización: la casa debe adecuar un lugar pedagógico para que el niño pueda resolver las tareas de una mejor manera; por ello, debemos adecuar el espacio físico y, además, en la mesa tener únicamente lo que se va a ocupar para que haya un ambiente de orden».
Asimismo, Mario González manifiesta que se debe «determinar el tiempo que se le va a dedicar a estas tareas. Los padres se agobian tanto que pueden saturar al niño y pasar hasta seis horas haciendo las tareas, con lo cual les están enviando un mensaje difícil; por ello, hay que dedicarle tiempo a lo que es, porque si no, aumenta la tensión».
«Recordemos que la curva de aprendizaje, para que un niño esté atento, eso varía entre 10 y 20 minutos. Hay padres que ya tienen una hora de estar con ellos y el método es continuar hasta topar, y el niño dejó de aprender desde hace horas», agregó el psicólogo.
También, el especialista señaló que «el ánimo con el que se realicen las tareas es fundamental para que el aprendizaje se dé; cuando nos ponemos en un estado negativo, el niño se bloquea y es imposible que nos entienda lo que ya está escrito, precisamente, porque está bloqueado. Asimismo, cuando nos ponemos nerviosos o en estado de ansiedad o en emergencia, solo nos da para tres cosas: huir, congelarse o para atacar; en cambio, cuando estamos tranquilos podemos tomar mejores decisiones».
«También debemos auxiliarnos de las herramientas tecnológicas para algunos vacíos que nosotros podamos tener; por ejemplo, el programa duolingo, este nos puede ayudar con idiomas extranjeros como el inglés, también hay otros juegos que nos ayudan a mejorar la Matemática y la ciencia, que son divertidas y tocan los puntos que traen esas guías», concluyó el psicólogo Mario González.