Mediante la «Reingeniería del Programa Modalidades Flexibles», el Ministerio de Educación (MINED) pretende que los jóvenes, que se atienden en las diversas sedes de estudio del Programa Modalidades Flexibles, adquieran además de las competencias académicas formación laboral y habilidades para la vida y el trabajo.
Lo anterior representa el incremento de 110 horas en la carga académica de cada estudiante. Así, los jóvenes que egresen de Bachillerato tendrán una formación integral y, en un corto plazo, podrán conseguir su primer empleo y mejorarán su situación social y económica.
«Uno de los elementos más importantes de la reingeniería ha sido la creación de la Modalidad Flexible Integrada, la cual mejora la oferta curricular al integrar tres componentes básicos: el componente académico, el componente de formación laboral y el componente de habilidades para la vida y el trabajo», destacó en la presentación de esta nueva ruta para la escolarización de jóvenes, María Elena Franco, asistente técnica de la Dirección Nacional de Educación de Jóvenes y Adultos del MINED.
Según detalló la funcionaria, la formación académica comprende seis módulos (Lenguaje y Literatura, Ciencias Naturales, Estudios Sociales, Moral Urbanidad y Cívica, Matemática e Inglés), los cuales se desarrollan según la necesidad y contexto de los estudiantes.
Las habilidades para la vida y el trabajo comprenden 30 lecciones y algunos talleres. En tanto, la formación laboral cubre 80 horas, con cursos cortos de inmediata aplicabilidad laboral, para ayudarles a desarrollar habilidades técnicas.
Con esta formación los jóvenes que estudian de lunes a viernes tendrán en total una carga académica de 1,070 horas de clases presenciales, con la siguiente distribución: 960 horas de componente académico, 30 horas de habilidades para la vida y 80 horas de formación laboral.
Mientras que, para los estudiantes de fin de semana, la carga presencial será de 480 horas con la siguiente distribución: 370 horas de componente académico, 30 horas de habilidades para la vida y 80 horas de formación laboral.
Esta apuesta se desarrolló con la asistencia técnica de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) con una inversión de cerca de 400 mil dólares.
Al respecto el Gerente de Programas Educativos de dicho organismo refirió que con esta iniciativa se facilitan áreas formativas que conectan a cada joven con el mundo laboral. Además, puntualizó que, «el gobierno y pueblo de los Estados Unidos se suma a los esfuerzos de El Salvador para mejorar el acceso a una educación de calidad».
En la actualidad, el piloto de este esfuerzo se realiza en siete sedes de estudio ubicadas en San Miguel, Sonsonate y San Salvador, con jóvenes (entre los 18 y 24 años) que cursan 9° grado y primer año de bachillerato, bajo la modalidad semipresencial y a distancia. Esos jóvenes reciben formación laboral en cocina internacional, cosmetología y otros oficios para que busquen empleo en dichas áreas o inicien su propio negocio.
Uno de esos jóvenes es Gustavo Ruíz, quien ha retomado sus estudios de primer año de bachillerato en el Centro Escolar General Francisco Morazán, donde asiste los fines de semana.
«No fue fácil volver a conectar con los estudios, pero al estar dentro de un aula nuevamente pensé que la vida me había dado una segunda oportunidad, que yo pensaba ya había perdido», dijo.
La reingeniería de las Modalidades Flexibles también comprende el desarrollo del Sistema Integral de Gestión Operativa (SIGO), con el que ahora el MINED tiene información, en línea y en tiempo real, sobre la gestión administrativa y técnica de las Modalidades Flexibles.
Esta herramienta tiene un valor de $55,000 y permite controlar la atención educativa que se brinda en todas las zonas del país, la cobertura de contenidos y la asistencia de los docentes tutores y estudiantes. De igual forma, los estudiantes podrán conocer su situación académica y tendrán acceso a un repositorio didáctico, para que puedan prepararse para sus evaluaciones y cierres de módulos.