Cerca de 100 personas, entre estudiantes y docentes, se dieron cita en el parque de San Francisco Gotera del departamento de Morazán, para demostrar expresiones musicales a través del Proyecto «Soy Música», iniciativa con la que se busca promover la convivencia escolar, una cultura de paz en la comunidad educativa, así como las habilidades y destrezas musicales.
Estudiantes y docentes realizaron dinámicas musicales y de juego, fortaleciendo lazos de convivencia, solidaridad y compañerismo; pero, sobre todo, pasar un rato de sana convivencia a través de la música.
Para la docente Estela Turcios, «este proyecto es un logro y es una herramienta muy útil para nosotros (docentes) porque así podemos identificar a los estudiantes y poder ayudarle mejor; vemos los cambios, pasan de niños apenados a niños más alegres, ellos crean sus propios instrumentos, cantan, bailan y los que nunca se reían, ahora lo hacen y eso es un gran logro. Como docente me siento orgullosa».
Asimismo, el docente Edwin Portillo expresó sobre «Soy Música»: «Es un proyecto muy hermoso, que inició como musicoterapia para la convivencia, pues la música tiene mucho beneficio porque el que desarrolla música, despierta muchas habilidades, y lo mejor es que con «Soy Música» no necesitamos grandes instrumentos, lo hacemos de material reciclado».
Por su parte, el estudiante Merlín Guzmán expresó que a través de estas acciones «nos ayudan a encontrar nuestros talentos, demostrar nuestra creatividad, cantamos y hacemos música».
«Me encanta la creatividad con la que hacemos las cosas, las canciones, la música, eso nos llega al corazón, nos relaja y nos sirve como un pasatiempo», dijo el estudiante Oliver Araujo.
Igualmente, la estudiante Yesica Gómez manifestó: «Me gusta la canción «Morazán» y «Maíz»; ojalá y siga este proyecto porque me encanta la música, me motiva a seguir adelante y conozco cosas de mi país con las canciones».
El proyecto «Soy Música», es implementado por el Ministerio de Educación y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en Alianza con Musicians Without Borders, quienes han adaptado su metodología a la realidad salvadoreña y buscan enseñar música con el cuerpo y con recursos re-utilizables; el impacto ha sido muy satisfactorio porque las clases son muy divertidas.