Referentes y coordinadores de primera infancia a nivel nacional intercambiaron opiniones sobre los avances y acciones pedagógicas a seguir en el segundo semestre de 2019, esto con el fin de dar cumplimiento de atención a la primera infancia con enfoque de derecho e inclusión.
Brunilda Peña de Osorio, directora nacional de Primera infancia, interina ad-honorem, expresó que como dirección «hemos iniciado una coordinación muy estrecha con los asesores pedagógicos y referentes territoriales en lo relativo a monitoreo, seguimiento y apoyo técnico, en ese sentido estamos con las proyecciones del Plan Operativo Anual».
Además, «presentamos el Programa Nacer Crecer, que es la concepción con la que este gobierno va a trabajar el tema de la primera infancia ( ) es un programa muy alentador, es integral, que implica todas las dimensiones de las niñas y niños, su personalidad, su área cognitiva, socioemocional, sicomotora, están siendo consideradas; que no solo sean vistos como estudiantes, también ve otras dimensiones intersectoriales como el tema de salud, nutrición, lactancia materna, prevención del cáncer cervical, peso», dijo Peña.
Asimismo, Nacer Crecer destaca «la protección integral, porque las niñas y niños necesitan entornos saludables y seguros, protectores, eso va incrementar definitivamente la calidad en el sistema educativo, a modificar las prácticas de crianza en las familias, hogares más interactivos y con menos violencia», aseveró la Directora de Primera Infancia.
A pesar que se ha avanzo en este tema de cobertura, según de Osorio, «aún es insuficiente, tenemos 37 mil niños y niñas atendidos en las edades de cero a tres años, que para nosotros es la educación inicial, de los cuales 20 mil son atendidos por el MINEDUCYT y el resto por aliados como la cooperación internacional y ong´s».
Es de mencionar, que lo más importante del desarrollo de la personalidad se logra en la primera infancia, de ahí que el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología asume como prioritario invertir esfuerzos y recursos para que el sistema responda con estándares de calidad a los intereses y necesidades educativas de la niñez, con servicios educativos de calidad y con equidad, en ambientes amigables y pertinentes.
