En el marco del Día del Maestro, conoceremos la historia de Helen Vanessa Chávez de López, una docente con vocación y sensibilidad para atender a la niñez y adolescencia con discapacidad en la Escuela Educación Especial de Mejicanos. Ella combina la enseñanza regular con lo virtual gracias a las nuevas computadoras entregadas por el Gobierno del Presidente Bukele para garantizar la equidad de oportunidades en los aprendizajes.
La maestra Helen Vanessa Chávez se graduó en el 2014 como Licenciada en Educación. Ella atiende a estudiantes de Tercer Ciclo con discapacidad intelectual, síndrome de Down, Trastorno de Espectro Autista (TEA), baja visión y disminución de la capacidad auditiva (conocida como hipoacusia).
«Yo estudiaba Arquitectura, pero la vida me cambió cuando trabajé con niños con discapacidad en un proyecto social (…) Me mantuve firme en que mi vocación era trabajar con los niños con discapacidad», así recordó la educadora.
Durante cuatro años, Chávez dio clases en la Escuela de Educación Especial de San Vicente y ahora comparte sus conocimientos con los estudiantes de la Escuela de Educación Especial en Mejicanos. Para ejercer, ella cuenta con muchas características que la hacen una maestra excepcional: sensibilidad, creatividad, empatía, innovación y dominio de los recursos tecnológicos.
«Feliz de trabajar con nuestros alumnos porque podemos ampliar el horizonte de los niños con discapacidad y sus familias, porque la educación debe ser integral. Somos un equipo, es decir: docente, alumno y padre de familia», aseveró.
En El Salvador, el Ministerio de Educación, a través de la Dirección Nacional de Inclusión, implementa una política integral con alumnos que tienen algún grado de discapacidad. La política educativa es clara: todos tienen derecho a la educación y a las mismas oportunidades de desarrollo y superación.
Bajo este lema y en el marco del programa Enlaces con la Educación, el MINED entregó computadoras portátiles a docentes y estudiantes con discapacidad. La emoción es evidente en los chicos y grandes de la Escuela Especial de Mejicanos, ya que estos recursos digitales fueron adecuados a las diversas discapacidades de cada alumno.
«El cambio es evidente: nuestros estudiantes se han integrado con el trabajo virtual sin problema. A ellos se les abrió un mundo de oportunidades y nuestro objetivo es que la educación trascienda del aula al hogar y a la sociedad misma», subrayó la maestra.
El cariño y la estima que tienen los estudiantes por sus docentes en la Escuela Especial del municipio de Mejicanos es acogedor y esperanzador. No hay mejor legado que dejar una huella de amor en el corazón de cada niño, niña y adolescente.