El docente Eric Francisco Aguilar Mejía es de la nueva generación de Maestros por la Transformación Educativa. Su especialidad es Matemática, su sueño es dejar en los estudiantes el legado del gusto por los números y las ecuaciones. El Ministerio de Educación (MINED) realizó recientemente un Concurso Especial de Plazas Vacantes para Docentes por Ley de Salarios, lo que posibilito que muchos jóvenes maestros como Eric Aguilar se incorporaran a las aulas.
Eric Francisco Aguilar se graduó de profesor de Matemática en la Universidad de El Salvador en el año 2017, fue instructor en el programa “Jóvenes Talentos” y dio clases en colegios privados. Considera que el concurso impulsado por MINED es innovador, «es un proceso que se necesitaba por ser innovador, la plaza la obtuve por evaluación de conocimientos y no yendo de escuela en escuela, que a veces están en zonas de riesgo (…) pero sí, hay que destacar que es innovadora la evaluación realizada», manifestó el profesor Aguilar.
El docente novel reside en Santiago Nonualco y viaja en transporte público todos los días al Complejo Educativo Cantón Barahona, del municipio de San Pedro Masahuat, departamento de La Paz. Al centro educativo asisten 10 docentes y 240 alumnos desde Parvularia hasta Educación Media. Él imparte clases desde 7º grado hasta 2º año de bachillerato.
En la institución fue recibido con los brazos abiertos por los docentes y le han brindado todo el apoyo, es un joven al que le gustan los números desde pequeño y sus notas promedio han sido sobresaliente en Educación Media y Superior: «Me gustan los números desde que tengo consciencia (…) una profesora de III Ciclo me motivó a seguir esta especialidad y acá estoy compartiendo mis conocimientos», explicó.
La educación ha dado un salto importante en lo tecnológico, lo que facilita la enseñanza-aprendizaje en el aula. El profesor Aguilar interactúa con los estudiantes quienes se apoyan con la computadora portátil y los hace participar en el desarrollo de los ejercicios.
«El legado más importante que dejaremos es que los estudiantes tengan el deseo de seguir aprendiendo, porque quiero que vean la Matemática como algo necesario en la vida, que genera un pensamiento crítico (…) los estudiantes tienen temor al algebra, pero vamos a quitarles ese miedo», concluyó.
El complejo educativo está ubicado en la cúspide de un cerro donde está situado el Cantón Barahona, al poniente del Río Jiboa, al norte del cerro Quezalapa. Es un lugar muy modernizado, muchos viven de la agricultura, otros de las remesas familiares. Para el docente Aguilar es un sueño hecho realidad porque hoy cuenta con una plaza oficial cerca de su residencia.