El Instituto Nacional “General Jaime Abdul Gutiérrez”, situado en el departamento de Sonsonate, impulsa el Bachillerato Técnico Vocacional en Mecánica Automotriz, desde hace más de 25 años. Muchos exalumnos laboran en empresas relacionadas a la rama de automotores. La nueva promoción de bachilleres tiene grandes expectativas en el mercado laboral.
La institución educativa de Sonsonate tiene una matrícula de 496 estudiantes y les brinda el Bachillerato General, así como las opciones en Contaduría y Mecánica Automotriz. El director Guillermo Alfredo Monge, dice que es un centro educativo con mucho prestigio y «varios de nuestros ex alumnos son profesionales, en mi caso acá estudie y así he visto a muchos en puestos claves (…) a los jóvenes les brindamos los conocimientos necesarios para que salgan a trabajar a una empresa o a estudiar una carrera profesional», dijo.
En el taller de práctica hay motores de vehículos, equipo eléctrico, un stock completo de herramientas, equipo de soldadura, calibrado, aparatos de medición de voltaje, y mucho más. Los estudiantes de último año de bachillerato se preparan para trabajar en mecánica general, pero en el futuro se pueden especializar en otras áreas.
El docente e ingeniero Obed Gómez dice que los jóvenes están preparados para su futuro. «En los tres años de estudio, ellos aprenden a soldar, cortar, tener conocimientos de las herramientas básicas, además, aprenden a ajustar un motor, a conocer la parte eléctrica y trabajar en lo electrónico, o sea ya van con las capacidades necesarias para desempeñarse en la mecánica automotriz», dijo Gómez, quien además es exalumno, y con tres títulos profesionales relacionados al área.
El Ministerio de Educación (MINED) impulsa la educación pertinente y de calidad, y en ese sentido, las oportunidades de los alumnos de Sonsonate son muchas, por ejemplo: en las plantas industriales de Acajutla, empresas dedicadas al mantenimiento automotriz o ser emprendedores y abrir su propio taller.
Reina Marina Zaldaña, es una alumna destacada, vive en el Cantón el Sálamo, a 7 kilómetros del centro de estudio, ella camina dos horas diariamente para no perder sus clases. Reina tiene sus aspiraciones, «quiero continuar mis estudios profesionales o abrir un taller de mecánica en mi cantón (…) somos pocas las mujeres en el bachillerato, pero tenemos deseos de salir adelante y ayudar a la familia», expresó. Reina es la última de siete hermanos.
Asimismo, el estudiante Alexis Trejo tiene clara su meta: «Quiero seguir mis estudios y ser profesor de mecánica (…) acá recibimos prácticas en motores, suspensión, sistemas eléctrico y electrónico, lo que nos permite tener conocimientos básicos para el futuro», manifestó Trejo.
El Bachillerato Técnico tiene el propósito de formar a los estudiantes con competencias y conocimientos básicos para desempeñarse en el mercado laboral, con una enseñanza de nivel medio, pero pueden continuar sus estudios en niveles superiores para alcanzar la meta deseada.