La Ministra de Educación, Ciencia y Tecnología, Carla Evelyn Hananía de Varela, junto al viceministro, Ricardo Cardona A., presentó el programa de reconstrucción de la infraestructura educativa nacional «Reduciendo Brechas en la Educación», en el marco del Plan Control Territorial fase 2 denominado «Oportunidad».
Este es el primer esfuerzo de un plan mucho más grande que se hará como cartera de Educación y como parte del Gabinete de Bienestar Social, que permitirá reducir la brecha en infraestructura educativa y en vulnerabilidad de los estudiantes, así como dignificarlos, estos son de los primeros compromisos a asumir.
La titular de ramo señaló que «desde el Ministerio de Educación queremos liderar una transformación real del sistema educativo ( ) trabajar por reducir la brecha que existe dentro del mismo, brecha que comienza por condiciones de infraestructura que determinan y limitan el aprendizaje de los niños y las condiciones en que los docentes enseñan».
«Este día damos un primer paso, dando inicio al Plan Reduciendo Brechas en la Educación, con el cual atenderemos 187 escuelas seleccionadas por sus necesidades en infraestructura y por su ubicación en zonas de violencia», agregó la Ministra. La intervención se iniciará con 50 centros educativos de los mencionados por la funcionaria.
Estas instituciones educativas cumplen dos requisitos principales: estar dentro del rango de ejecución del Plan Control Territorial por presentar mayor nivel de vulnerabilidad y tener mayor deficiencia y necesidades en infraestructura.
«Este Plan va más allá de la infraestructura, incluye el mejoramiento de las respuestas pedagógicas a través de las herramientas y condiciones para llevar a la escuela al nivel de poder utilizar la tecnología al servicio del aprendizaje ( ) también preparar las condiciones para atender a los niños de 0 a 6 años ( ) nuestro compromiso en estos cinco años es garantizar una educación integral y de calidad tanto académica como personal, es un derecho y debemos garantizarlo», dijo Hananía de Varela.
Para esto, se contará con una inversión de más de $5 millones, presupuesto integrado por $2.5 millones del presupuesto anual de esta cartera de Estado y por $2.6 millones del presupuesto del Plan de Control Territorial, en su fase 2.
Esta acción también se articula con el trabajo de otras carteras del Estado, de esta manera, se tendrá el apoyo de los Ministerios de Obras Públicas, Justicia y Seguridad Pública, Salud, del Comisionado Presidencial para la Juventud y de la Unidad de Reconstrucción del Tejido Social, con el esfuerzo de todos se inicia la reconstrucción, mantenimiento y renovando los espacios educativos y de los accesos a las escuelas.
Algunos de los centros escolares están ubicados en los municipios de Soyapango, San Marcos, Mejicanos, Cuscatancingo, Apopa, Tonacatepeque y Nejapa (todos de San Salvador); El Congo y Chalchuapa (Santa Ana); y San Vicente (municipio). Además de Puerto El Triunfo, Jucuarán (Usulután) y Usulután (municipio); Moncagua (San Miguel) y San Miguel (municipio); Sonzacate (Sonsonate) y Sonsonate (municipio); y San Pedro Masahuat (La Paz).
Por su parte, el Viceministro de Educación, expresó que ahora «hay una nueva visión de la escuela, ahora ya no se ve como un centro de aprendizaje, sino como un centro de desarrollo comunitario, la escuela como centro articulador del conocimiento sirve para que los padres se integren más a la escuela, los niños con los docentes y que la comunidad en su conjunto tenga la capacidad de interactuar con la escuela y convertirla en un centro de desarrollo integral, tecnológico, de cultura, de arte, deporte para toda la comunidad».
«La escuela ya no solo es el lugar donde van a recibir conocimiento, sino que van a formar un nuevo ciudadano, el que El Salvador necesita a mediano y largo plazo», agregó Cardona.
La fase 2 del Plan Control Territorial permite el despliegue en el territorio del Estado a las comunidades recuperadas, ofreciendo mejores oportunidades de educación, salud, becas, inclusión social, empleo y otros beneficios, ayudando así a los jóvenes a que abandonen las pandillas o no ingresen a ellas. Esta fase tiene un presupuesto de $2 millones.